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Carta del director

Queridos socios y socias:

Cuando en 2020 está llegando a sus últimas semanas quiero dirigirme a vosotros, en representación de la Junta de gobierno, como lo hago cada año en Asamblea General.

Este año estamos atravesando por una situación excepcional que nunca nos hubiéramos podido imaginar, la pandemia global ocasionada por el virus SARS-Cov2, ya ha ocasionado en el día de hoy un gran número de infectados y muertos, especialmente a personas de edad avanzada, consideradas como grupo de riesgo extremo.

Estamos pasando por el pico de la segunda oleada y no sabemos si tendremos todavía una tercera o sucesivas.

La sanidad pública se ha visto seriamente comprometida al tener que afrontar un aluvión de ingresos hospitalarios con una carencia de recursos materiales y humanos y, sobre todo, con un desconocimiento de las terapias adecuadas que se han ido incorporando a medida que las comunicaciones científicas y la práctica de la medicina ha permitido determinar las mejores pautas para paliar los efectos de la enfermedad.

Los casos más graves han inundado las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de los hospitales, que han tenido que reconvertir quirófanos en UCI y, sobre todo, la atención primaria, la cirugía y las otras especialidades se han visto resentidas al dedicar masivamente los recursos humanos y materiales al control de la pandemia.

Aun así, todavía no hay una terapia definitiva, aceptada por la comunidad científica.

Las esperanzas ahora mismo están puestas en las vacunas que ya han concluido los estudios clínicos y han solicitado la autorización de las instituciones sanitarias en todo el mundo. A principios del año próximo parece que en Europa ya dispondremos de vacunas para iniciar la protección de las poblaciones de mayor riesgo.

Hemos comprobado la gran importancia estratégica que representa tener una agricultura propia y, en general, un sector agroalimentario que permita mantener el abastecimiento de alimentos. Por lo tanto, es preciso proteger nuestra agricultura frente a las amenazas que pueden hacerla desaparecer por carencia de rentabilidad y animar la incorporación de jóvenes en el campo.

Algunos sectores económicos han estado profundamente afectados, como el pequeño comercio y, especialmente, aquellos que dependen de la concentración y la movilidad de las personas, como el turismo, la hostelería, la restauración o el ocio colectivo.

Junto al problema sanitario se ha presentado el problema del paro con numerosas familias que han quedado sin recursos y han tenido que recurrir a la caridad y a los servicios sociales a pesar de las ayudas gubernamentales, que a menudo no han sabido responder con la fluidez requerida.

Algunos sectores han salido reforzados, especialmente los basados en las redes sociales y la venta telemática o aquellos que se han sabido reconfigurar para aprovechar la oportunidad que presenta una situación tan excepcional.

La necesidad de apoyar la ciencia y la tecnología como lo venimos haciendo en esta Sociedad Económica de Amigos del País desde antaño, y hemos reclamado año tras año, se ha visto más claro que nunca y ahora se impone un aumento drástico en los presupuestos de investigación para acercarnos a los países punteros de la Unión Europea como es el caso de Alemania porque dedicar un 6% del PIB como lo hace China parece inabordable en la actualidad.

En cuanto a la Sociedad Económica, aparte del mantenimiento del servicio de biblioteca y archivo, las actividades, que teníamos programadas han tenido que aplazarse tal como se ha hecho en casi todos los actos oficiales de asistencia presencial. Esperamos emprender las actividades al comenzar en 2021.

Llegamos a la fecha en que cada año nos reunimos en Asamblea General tal como está establecido en el artículo 15 de los estatutos de la Real Sociedad Económica de Amigos del País para ejercer las competencias previstas en el artículo 16.

Muchas de estas competencias requieren la participación y la aprobación, si es oportuno, por votación de algunos puntos.

Cada año lo venimos haciendo, reuniéndonos de manera presencial en asamblea y desde algún tiempo en el Conservatorio Profesional de Música de València.

Ahora mismo, como hemos dicho antes, estamos atravesando un pico en la curva de evolución de la segunda ola de la pandemia en el estado español y en el territorio valenciano, que hace cuestionable juntar gran número de personas. A pesar de que la asistencia a las asambleas no suele ser tan numerosa como sería deseable, todos los socios tienen el derecho de asistir y participar en las decisiones.

Actualmente tenemos restringido el aforo en locales cerrados, cosa que impide la asistencia generalizada. A esto se añade la edad avanzada de muchos de los socios que, como grupo de más riesgo por afectación grave de la enfermedad, es también una materia a considerar que desaconseja una reunión presencial.

Existe la posibilidad de hacer una reunión telemática tal como lo venimos haciendo en las Juntas de Gobierno desde el inicio de la pandemia, pero una reunión telemática masiva con posibilidad de votar presenta dificultades a la hora de ofrecer igualdad de condiciones, con estas tecnologías, para conectarse y/o efectuar las votaciones oportunas.

Es por eso que parece razonable, en una situación de excepcionalidad como esta, aplazar la Asamblea General por unos meses, mientras, de acuerdo con el artículo 25 k) de los estatutos sociales, el presupuesto para 2021 será aprobado por la Junta de Gobierno y será sometido a ratificación en la próxima Asamblea General.

Sin nada más, quiero acabar deseándoos lo mejor y que en 2021 nos permita superar esta situación nefasta.

Saludos cordiales

Vicent Cebolla i Rosell

Director de la RSEAPV


Benvolguts socis i sòcies:

Quan l’any 2020 està arribant a les darreres setmanes vull adreçar-me a vosaltres, en representació de la Junta de govern, com ho fem cada any en Assemblea General.

Enguany estem travessant per una situació excepcional que mai ens haguérem pogut imaginar, la pandèmia global ocasionada pel virus SARS-Cov2, ja ha ocasionat al dia de hui un gran nombre de infectats i morts, especialment a persones d’edat avançada, considerades com a grup de risc extrem.

Estem passant pel pic de la segona onada i no sabem si en tindrem encara una tercera o successives.

La sanitat pública s’ha vist sèriament compromesa en tindre que afrontar un al·luvió d’ingressos hospitalers amb una manca de recursos materials i humans i, sobre tot, amb un desconeixement de les teràpies adients què han anant incorporant a mesura que les comunicacions científiques i la pràctica de la medicina ha permès determinar les millors pautes per a pal·liar els efectes de la malaltia.

Els casos més greus han inundat les Unitats de Cures Intensives (UCI) dels hospitals, que han hagut de reconvertir quiròfans en UCI i, sobre tot, l’atenció primària, la cirurgia i les altres especialitats s’han vist ressentides en dedicar massivament els recursos humans i materials al control de la pandèmia.

Tot i això, encara no hi ha una teràpia definitiva, acceptada per la comunitat científica.

Les esperances ara mateix estan posades en les vacunes que ja han conclòs els estudis clínics i han sol·licitat l’autorització de les institucions sanitàries arreu del món. A primeries de l’any vinent sembla que a Europa ja disposarem de vacunes per a iniciar la protecció de les poblacions de major risc.

Hem comprovat la gran importància estratègica que representa tindre una agricultura pròpia i, en general, un sector agroalimentari que permeta mantindre l’abastiment d’aliments. Per tant, és precís protegir la nostra agricultura front a les amenaces que poden fer-la desaparèixer per manca de rendibilitat i animar la incorporació de jóvens al camp.

Alguns sectors econòmics han estat profundament afectats, com el xicotet comerç i, especialment, aquells que depenen de la concentració i la mobilitat de les persones, com el turisme, la hostaleria, la restauració o l’oci col·lectiu.

Junt al problema sanitari s’ha presentat el problema de l’atur amb nombroses famílies que han quedat sense recursos i han hagut de recórrer a la caritat i als serveis socials malgrat les ajudes governamentals, què sovint no han sabut respondre amb la fluïdesa requerida.

Alguns sectors han eixit reforçats, especialment els basats en les xarxes socials i la venda telemàtica o aquells que han sabut re-configurar-se per aprofitar l’oportunitat que presenta una situació tan excepcional.

La necessitat de recolzar la ciència i la tecnologia com ho venim fent en aquesta Societat Econòmica d’Amics del País des d’antuvi, i hem reclamat any rere any, s’ha vist més clar que mai i ara s’imposa un augment dràstic en els pressupostos d’ investigació per apropar-nos als països punters de la Unió Europea com és el cas d’Alemanya perquè dedicar un 6 % del PIB com ho fa la Xina sembla inabordable en l’actualitat.

Pel que fa a la Societat Econòmica, a part del manteniment del servei de biblioteca i arxiu, les activitats, que teníem programades han hagut de ajornar-se tal com s’ha fet en gairebé tots els actes oficials d’assistència presencial. Esperem mamprendre les activitats en encetar l’any 2021.

Arribem a la data en què cada any ens reunim en Assemblea General tal com està establert a l’article 15 dels estatuts de la Reial Societat Econòmica d’Amics del País per tal d’exercir les competències previstes en l’article 16.

Moltes d’aquestes competències requereixen la participació i l’aprovació, si és oportú, per votació d’alguns punts.

Cada any ho venim fent, reunint-nos de manera presencial en assemblea i des d’algun temps al Conservatori Professional de Música de València.

Ara mateix, com hem dit abans estem travessant un pic en la corba d’evolució de la segona ona de la pandèmia a l’estat espanyol i al territori valencià, que fa qüestionable ajuntar gran nombre de persones. Tot i que l’assistència a les assemblees no sol ser tan nombrosa com seria desitjable, tots els socis tenen el dret d’assistir i participar en les decisions.

Actualment tenim restringit l’aforament en locals tancats, cosa que impedeix l’assistència generalitzada. A això s’afegeix l’edat avançada de molts dels socis que, com a grup de més risc per afectació greu de la malaltia, és també una matèria a considerar que desaconsella una reunió presencial.

Existeix la possibilitat de fer una reunió telemàtica tal com ho venim fent en les Juntes de Govern des de l’inici de la pandèmia, però una reunió telemàtica massiva amb possibilitat de votar presenta dificultats a l’hora d’oferir igualtat de condicions, amb aquestes tecnologies, per a connectar-se i/o efectuar les votacions escaients.

És per això que sembla raonable, en una situació d’excepcionalitat com aquesta, ajornar l’Assemblea General per uns mesos, mentre, d’acord amb l’article 25 k) del estatuts socials, el pressupost per a 2021 serà aprovat per la Junta de Govern i serà sotmès a ratificació en la propera Assemblea General.

Sense res més, vull acabar desitjant-vos el millor i que l’any 2021 ens permeta superar aquesta situació nefasta.

Salutacions cordials

Vicent Cebolla i Rosell

Director de la RSEAPV

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